El
objetivo de este manual de primeros auxilios es proporcionar los
conocimientos mas elementales para dispensar una ayuda eficaz a aquellas
personas que han sufrido algún tipo de accidente.En casos extremos son
necesarios para evitar la muerte hasta que se consigue asistencia
médica.Los primeros auxilios varían según las necesidades de la víctima y
según los conocimientos del socorrista. Saber lo que no se debe hacer es tan importante como saber lo qué hacer,
porque una medida terapéutica mal aplicada puede producir
complicaciones graves. Cualesquiera que sean las lesiones, son
aplicables una serie de normas generales. Siempre hay que evitar el
pánico y la precipitación. A no ser que la colocación de la víctima lo
exponga a lesiones adicionales, deben evitarse los cambios de posición
hasta que se determine la naturaleza del proceso. Un socorrista
entrenado ha de examinar al accidentado para valorar las heridas,
quemaduras y fracturas. Se debe tranquilizar a la víctima explicándole
que ya ha sido solicitada ayuda médica. La cabeza debe mantenerse al
mismo nivel que el tronco excepto cuando exista dificultad respiratoria.
En ausencia de lesiones craneales o cervicales se pueden elevar
ligeramente los hombros y la cabeza para mayor comodidad, pero es
conveniente no mover al accidentado.